la máquina del tiempo

Hace unos mil años que no escribo por aquí, y las cosas han cambiado tanto...
sería imposible resumir todo este periodo de mi vida, desde que un día cogí una maleta y mi diccionario de inglés y me planté en otra ciudad, con mucha ilusión pero también con demasiada ingenuidad.

Afortunadamente, el tiempo te da todo lo que necesitas y te quita lo que estorba, porque en dos años y medio da tiempo a mucho... reír, llorar, charlar, descubrir gente buena, gente mala, gente sin definir, aprender a cocinar, salir de fiesta hasta las mil...y como última cosa...estudiar

Ya no soy una recién universitaria, sino...¡una veterana!

Extraño muchas cosas de aquellos comienzos, todo era nuevo y emocionante, se vivía rápido y se dormía poco, se charlaba durante horas y se reía por cualquier cosa.Pero hoy no cambio mi vida por aquellos primros momentos, hoy soy feliz.


Sinceramente yo siempre he sido de las nostálgicas, de las que se agarran al pasado como un koala a su árbol favorito, pero hace poco

¿cuándo descubres que una etapa ha acabado? Cuando dejas de mirar hacia atrás con tristeza, y miras hacia delante con optimismo. Y te quieres comer el mundo.

descubrí que así no se vive bien, no disfrutas de lo que tienes delante.

Así que si me permitís un consejo, guardad esos momentos en una caja bajo llave, estarán ahí, siempre...pero el presente es el presente.Y mi presente es este, tercero de Filología inglesa.

La recién universitaria se ha convertido en una veterana.